Nosotros recibimos correos electrónicos constantemente, a veces de personas que conocemos, personas que no conocemos, correos con contenido saludable, o bien con contenidos dañinos (virus, spam, etc) razón por la cual hay que estar muy alertas al momento de abrir un determinado correo.
Cuando el mensaje que recibimos lleve uno o más ficheros adjuntos debemos tener mucho cuidado, especialmente si el mensaje nos lo manda alguien que no conocemos. Hay peligro de que los archivos contengan virus (malware, spyware, etc). Sólo los abriremos si estamos seguros de su procedencia, contenido y si tenemos instalado un buen antivirus.
Cuando en un mensaje sospechoso se nos ofrezca darnos de baja de futura recepción de mensajes o de un boletín no haremos caso, es decir, no responderemos el mensaje, ni escribiremos a ninguna dirección supuestamente creada para tal fin, ni pincharemos sobre un enlace para ello. Si hiciéramos algo de lo citado confirmaríamos a los spammers que nuestra cuenta de correo electrónico existe y está activa y, en adelante, recibiríamos más spam.
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